El futbolista del Manchester City, Jack Grealish, sufrió un robo en su casa mientras jugaba contra el Everton el pasado miércoles y los ladrones se llevaron objetos por valor de un millón de libras (1,3 millones de euros).
En la casa del futbolista, una mansión de 5,5 millones de libras, había varios miembros de su familia que se habían reunido para ver el encuentro del City contra el Everton.
Cuando estos notaron el comportamiento extraño de los perros del futbolista, trataron de alertar a la policía, que a su llegada no encontró rastro de los ladrones.
Los asaltantes se llevaron relojes y joyas por valor de un millón de libras, pero no hicieron daño a ninguna de las personas que estaban en la casa.
Según ‘The Sun’, Grealish se mudó a esta mansión, que cuenta con pistas de tenis, un campo de fútbol y un lago, antes de navidades, junto a su pareja, la modelo Sasha Attwood.
La policía de Cheshire confirmó que recibió el aviso de un robo, que lo están investigando y que no han hecho ninguna detención por el momento.
Es la segunda vez en este mes de diciembre que un jugador de la Premier sufre un robo en su casa, después de que Kurt Zouma, del West Ham, fuera asaltado el pasado 2 de diciembre, con el club ofreciendo una recompensa de 25.000 libras a quien pudiera dar información sobre el caso.