La Juventus de Turín duerme líder tras ganar en casa al Nápolés (1-0), que sigue sin levantar cabeza. El conjunto de Allegri venció por la mínima gracias a un tanto de Gatti, volvió a demostrar que es un equipo con mucho oficio y dejó claro que es candidato al título.
La primera parte tuvo de todo menos goles. La Juve tuvo el dominio pero las ocasiones mas claras las puso el Nápoles. Avisó primero con un gol fantasma que salvó Szczesny, luego fue Kvaratskhelia el que se quedó mano a mano contra el polaco y no definió bien, y por último el meta bianconero se hizo enorma para evitar el tanto de Di Lorenzo a bocajarro.
Para la ‘Vecchia Signora’ Chiesa fue el que capitalizó el peligro aunque fue Vlahovic el que tuvo la más clara, pero el serbio sigue sin estar a su mejor nivel.
La segunda parte empezó con el cuadro juventino mucho más activo en ataque, y fruto de ello llegó el tanto de Federico Gatti al poco de salir del vestuario. Un centro de Cambiaso lo cabeceó el defensa italiano, tras un aviso previo de Vlahovic que terminó en el palo, para poner batir a Meret y hacer el único tanto del duelo.
A partir de ahí el partido cambió, el Nápoles se fue en busca del empate y la Juve se replegó. En ese terreno el conjunto de Allegri se siente comodísimo y pese al asedio napolitano, nunca hubo la sensación de que la victoria local corría peligro.
La Juventus sigue mirando para arriba y el Nápoles encadena ya su tercera derrota seguida contando todas las competiciones, la cuarta en cinco partidos.